Encontrar un ERP que se ajuste a tus necesidades no es tarea fácil. Y, aunque quizás no seas consciente, es igual o incluso más importante encontrar a la consultora/partner que te acompañe en el proceso de cambio. La implementación de un nuevo ERP forma parte de un proceso de mejora empresarial y es casi imposible realizarlo sin ayuda.
Cambiar de ERP es una decisión difícil y que da vértigo, porque va parejo de una pequeña-gran revolución al haber un cambio procedimental y, en general, un cambio en las costumbres diarias de los usuarios. Pero con un sistema adaptado a nuestros objetivos podremos ver al fin nuestras expectativas satisfechas. En Factor Libre hemos contado con muchos clientes en busca de una nueva solución y sabemos cuándo es el momento de cambiar de ERP si el actual no está funcionando.
Cuándo apostar por un nuevo ERP
Las empresas evolucionan y, si todo va bien, esto se traduce en un plan de objetivos más ambicioso y unos resultados que irán pidiendo cambios para poder mantenerlos. Normalmente, el cambio de software de gestión vendrá dado por la obsolescencia (o ausencia) del actual, así como su incapacidad de adaptarse a los nuevos retos.
Nuestro ERP es una evolución de Odoo, el software de gestión lider del mercado, que hemos mejorado con funcionalidades propias y comunitarias enfocadas a clientes de producto físico. Es un sistema flexible y escalable y desde Factor Libre lo ajustamos al caso concreto del cliente tras hacer una valoración previa en la que podamos entender tu situación y acompañarte en la búsqueda de soluciones adaptadas a ti.
5 claves a la hora de cambiar de ERP
Funcionalidades
Elegir el sistema ERP adecuado con las funcionalidades correctas es crucial para cualquier empresa que busque optimizar sus operaciones y aumentar su eficiencia. Las funcionalidades deben ser lo suficientemente versátiles para adaptarse a las necesidades específicas del negocio, facilitando la automatización de tareas repetitivas, mejorando la precisión de los datos y ofreciendo análisis en tiempo real que respalden la toma de decisiones estratégicas.
Además, al adaptar el sistema a los requerimientos exactos del entorno empresarial, las compañías pueden evitar el exceso de personalización que a menudo lleva a complicaciones costosas y prolongadas implementaciones.
Experiencia del implantador
La experiencia del implementador del ERP es igualmente importante y suele ser un factor a veces minusvalorado. Se suele decir que hay implementadores generalistas, que aceptan proyectos de todo tipo, y especialistas, que tienen su marco de trabajo acotado. Nosotros apostamos por esta segunda vía, dado que trabajar con un implementador que posea un profundo conocimiento del sector puede marcar la diferencia entre un proyecto de ERP que entrega valor real y otro que simplemente consume recursos sin cumplir con las expectativas.
Un implementador especializado no solo entiende los desafíos únicos del sector, sino que también conoce las mejores prácticas y tendencias emergentes, asegurando que la solución ERP no solo sea relevante en el momento de la implementación sino que también pueda escalar y evolucionar a medida que cambia la industria.
Inversión (en tiempo)
El tamaño y complejidad de la empresa, la cantidad de datos a migrar o la personalización requerida son factores que influyen en cuánto tiempo se necesita para cambiar o implementar un ERP… y en gran medida, ese tiempo también dependerá de la implicación del cliente como parte activa del proyecto.
Es un punto vital, muchas veces minusvalorado. El implementador necesita que los usuarios claves estén siempre disponibles cuando sea necesario, que les apoyen en cuantas necesidades surjan y que se formen de manera exitosa. Al final, el tiempo invertido en la implementación de un ERP se refleja en una mejora sustancial de la eficiencia y productividad de la empresa, lo que justifica ampliamente la inversión inicial de tiempo y esfuerzo.
Inversión (económica)
Es uno de los mayores temores, pese a que con un ERP bien implementado el retorno de la inversión es alto, con una reducción de costes o con un aumento de capacidad al ser más eficiente. Además, los usuarios suelen cambiar su rol y responsabilidades, hacia aquellas de más calidad.
Además, nuestro ERP ahorra en costes de licencias (no tiene) y, en términos generales, se aleja de las inversiones elevadas de los ERP tradicionales, al permitirnos ser más ágiles con la solución en sí y con nuestra metodología de implementación.
Mantenimiento evolutivo
En Factor Libre contamos con consultores especializados que te guiarán en cada etapa de la migración, desde la planificación hasta la implementación, atendiendo a las preguntas o preocupaciones que puedan surgir. Al final de la migración, el mantenimiento evolutivo sigue siendo imprescindible para ocasiones en las que puedas necesitar asistencia, o para añadir funcionalidades.
El cambio o implementación de ERP puede parecer misión imposible, pero con una buena planificación y la colaboración de implementador y cliente, la migración se realiza con éxito. Los flujos de trabajo no tienen por qué interrumpirse y el resultado es una empresa mucho más eficiente. En Factor Libre hemos acompañado a cientos de empresas en este proceso de cambio de ERP, ajustándonos a sus necesidades y optimizando su software para que sus objetivos sean una realidad.