Cómo gestionar tus acciones comerciales con Odoo

El mayor problema que se plantean los departamentos comerciales hoy en día es la gestión de todas y cada una de las acciones comerciales que realizan sus comerciales dentro del entorno empresarial.

Cada acción comercial puede convertirse en cliente, por lo que tenemos que tener en cuenta que este tipo de circunstancia nos obliga a que la gestión del “usuario” tiene que poder ser progresiva, flexible y con funcionalidades agregadas en función de la etapa en la que se encuentre.

Odoo nos permite realizar esta gestión a través de un método que sigue el modelo Canvas.
Los nuevos potenciales clientes entran en el sistema como Iniciativas, desde aquí podemos etiquetarlos, añadir las observaciones que consideremos oportunas e incluso programar una próxima llamada, reunión o gestión en torno a ellos.
Si están iniciativas comienzan a tener atisbos de convertirse en realidad (el cliente nos indica su deseo directamente, vemos que por su perfil tiene muchas probabilidades de convertirlo, …) le cambiaremos su estado y pasara a llamarse Oportunidad.
Dentro de las Oportunidades, podemos desatacar tres tipos de estados:

  • Nuevo: La acción comercial que pasa de Iniciativa a Oportunidad, sin más.
  • Ganado: Cuando hemos conseguido materializar la acción y se convierte en nuestro cliente, momento en el cual podemos abrirle ficha de cliente, gestionar las cuestiones de cobro, presupuestos, facturas, devoluciones, atención al cliente, … Cuestiones que iremos tratando detalladamente en próximos post debido a su extensión y necesidad de explicación.
  • Perdido: Cuando finalmente vemos que esta oportunidad no supondrá para nosotros una posibilidad de obtener ingresos para nuestra empresa, la marcamos como perdida. Y es muy relevante esta etapa, ya que muchos otros ERP optan por suprimir de la base de datos. Nosotros creemos que Odoo acierta, ofreciendo la posibilidad de mantener el histórico y poder consultar esta información de cara a futuro, e incluso para no volver a impactar a este usuario, si ese es su deseo, o sí, en futuras promociones o campañas.

Este proceso es el estándar, pero lógicamente es personalizable atendiendo al tipo de negocio y el proceso que lleve de cara a la gestión de los usuarios, pudiendo alargar el proceso según se necesite.